martes, 16 de junio de 2009

Astrónomas

Hace 400 años Galileo Galilei, por primera vez, apuntaba al cielo con un telescopio. Ese gesto inaugural, que echó a rodar el desarrollo de la astronomía moderna, fue el elegido por la Unión Astronómica Internacional para proponer ante la Unesco que 2009 fuera designado el Año Internacional de la Astronomía con doce meses dedicados a difundir los aportes de esta disciplina. Dado que las mujeres también en astronomía forman una auténtica minoría activa –son el 13 por ciento a nivel mundial–, uno de los once proyectos que la IAU lleva adelante este año, que se llama “She is an astronomer” (Ella es una astrónoma), está dedicado a promover la igualdad de género y la discusión sobre los problemas específicos de las mujeres en la ciencia.

“La mayoría de las mujeres no cree que les haya sido más difícil conseguir ascensos o mejoras a nivel profesional en comparación con sus colegas varones, pero si se les pregunta si se sienten subrepresentadas en los institutos en los que trabajan, la respuesta generalmente es afirmativa”, observa en comunicación con Las 12 la inglesa Helen Walker, encargada de presidir el grupo de trabajo de “She is an astronomer” (www.sheisanastronomer.org), del que participan una docena de científicas de los cinco continentes. “Hay una especie de ‘goteo’ que hace que las mujeres vayan ‘cayéndose’ de la astronomía y de la ciencia en cada etapa, por eso me parece que las mujeres a las que generalmente interrogamos sobre estos temas pueden no ser las personas correctas, ya que nosotras hasta ahora hemos sobrevivido”, reflexiona esta experta en el diseño de telescopios espaciales que se desempeña en el Rutherford Appleton Laboratory y en la Agencia Espacial Europea.

Lo de “She is an astronomer” no será (sólo) una empresa dedicada a desempolvar cifras y estadísticas que hagan visible ese intangible techo de cristal que limita el cielo de las mujeres en astronomía. Se trata también de difundir información sobre el trabajo concreto y apasionante de estas mujeres, para que sirva de estímulo a las más jóvenes y también como forma de mejorar el estándar de trabajo de las ya involucradas. “Explorar el universo es, sin dudas para mí, uno de los trabajos más gratificantes que hay”, cuenta la astrofísica Gloria Dubner, investigadora principal del Conicet (en el Instituto de Astronomía y Física del Espacio), además de ser una de las fundadoras –a principios de la década del ’80– de la Asociación Latinoamericana de Mujeres Astrónomas (ALMA) y en la actualidad responsable en Latinoamérica del proyecto “She is an astronomer”.


anpliar publicado por pagina 12
Ver las estrellas