lunes, 6 de abril de 2009

En los diarios

House, el personaje, es un verdadero maestro en eso de proponerse como un enigma, esto es, como el objeto perfecto para la manía ajena por la interpretación. ¿Quién es House? ¿Por qué es como es? House es la máquina humana que todos quieren corregir, un aparato intelectualmente brillante al que colegas y amigos le reclaman la concesión de la afectividad. House tiene todas las condiciones, pero prefiere vivir una vida miserable, drogarse, tener una vida sexual furtiva y mercenaria (cuando cualquiera de las bellísimas médicas que lo rodean daría todo por conquistarlo, y nosotros por estar en la misma situación y aceptar). Además de hosco, es tacaño y tramposo. Tiene algo de matón, de ladino y de homosexual cuya represión es asumida cómicamente. La enumeración es infinita, pero la serie tiene la astucia de proponerla siempre como una trampa: la de un "trauma originario", desconocido tanto por el espectador como por sus compañeros de trabajo, que explicaría cada vez cada uno de sus comportamientos. Sobre esa presunción groseramente psicologista, House arma su fiesta antisentimental. Satisfecho de ocupar el lugar del héroe solitario, deja caer muestras eventuales de sus fisuras personales, sólo para después denunciarlas como falsas, como parte de su burla de los frágiles convencionalismos de la especie humana. El héroe cínico



Hay quienes se animan a poner obra, como el argentino Juan Carlos Andrade y su publicación de "Una larga noche", una novela por entregas que, según el autor, permite a los lectores "acompañar el proceso de escritura en el exacto ritmo del escritor" y los invita, cuando él dispone, a decidir sobre la trama. Pablo Toledo, ganador del Premio Clarín Novela 2000, promociona su nouvelle "Tangos chilangos" a través de Facebook, pero la enlaza a un blog en el que se descarga en formato PDF (especial para documentos que serán impresos). "Facebook no es un medio tan bien adaptado a la publicación y lectura de textos largos" dice Toledo. "Además ahí todo va como texto plano, copiable, pegable y plagiable. La protección del PDF se puede quebrar en cinco segundos con el programa adecuado, pero en Facebook no tengo siquiera esa opción". Muchos escritores están en la misma sintonía. La nueva narrativa con Facebook y Google



"La más agradable sorpresa y novedad de esta instancia periodística fue la modalidad de C5N (replicada en menor medida por Crónica TV) de no ceder a la tentación de que sean los movileros y locutores los que llenen los espacios, y dar lugar al silencio y a una suave musicalización.
Como dice muy bien Jorge Rial en su columna de Primicias Ya (hoy nos toca citar a gente con la que en general no concordamos): “El caso de C5N que, inteligentemente, decidió que no hacía falta una catarata de periodistas que trataran de contarnos de un dolor que cada uno ya sentía en su interior. No. Fueron imágenes y música. Nada más. Cada cara, cada gesto, cada lágrima, era la mejor narración sobre lo que estaba sucediendo”.

Muchas veces no hay nada como el silencio, una lección que los canales de noticias hasta ahora no estaban del todo dispuestos a aceptar.".Los sonidos del silencio
Toda TV es política


Con todas las salvedades que requiere una generalización, Carlos Neri, titular de la cátedra de Informática, educación y sociedad de la Facultad de Psicología de la UBA, admite que la personalidad puede expresarse en el modo en que se usa el e-mail.
De quienes se niegan a eliminar mensajes, Neri señala que podría tratarse de obsesivos retentivos: "Personas que tienen dificultades para tomar la decisión de terminar, de poner un corte a algo, sean relaciones o situaciones. Además, el guardar mensajes por uno o dos años, por ejemplo, puede hablar de una situación casi melancólica", explica Neri.La forma de usar el mail revela cómo somos



En el tango de Don Julio, treinta años no es nada
El 6 de abril de 1979, el por entonces titular de Independiente asumía el mando de la Asociación del Fútbol Argentina. En tres décadas pasó de todo: dictadores, presidentes, técnicos, negocios turbios, éxitos y frustraciones, muertes en el fútbol. Crónica del todo pasa.Los 30 años de Grondona en la AFA